¿Los zapatos altos realmente reducen el riesgo de esguince de tobillo? Esto es lo que dice la investigación

El esguince de tobillo es una de las lesiones musculoesqueléticas más comunes, particularmente en deportes como netball, baloncesto y fútbol, ​​donde saltar, aterrizar sobre un pie y cambios repentinos de dirección son parte del juego.

Los esguinces de tobillo pueden ser dolorosos, debilitantes y pueden provocar problemas continuos en el tobillo. De hecho, las personas con antecedentes de un esguince de tobillo previo tienen más probabilidades de sufrir un esguince de tobillo nuevamente en el futuro.

La prevención es clave. En un esfuerzo por reducir el riesgo de esguince, muchas personas buscan zapatos "de caña alta", donde la sección alrededor del costado del zapato (también conocida como "cuello") se extiende más cerca del tobillo.

¿Pero qué dice la investigación? ¿Los zapatos de caña alta realmente reducen el riesgo de esguince?

Las zapatillas altas no siempre ayudan y, a veces, pueden perjudicar

Existe mucha investigación sobre este tema, pero desentrañar la verdad es complicado por la inconsistencia entre los estudios. Los investigadores pueden tener diferentes formas de investigar el tema, de medir el éxito de los zapatos o incluso diferentes formas de definir un zapato "de caña alta".

Por ejemplo, la diferencia informada en la altura del cuello entre los zapatos "de caña alta" y "de caña baja" fue considerable, oscilando entre 4,3 y 8,5 cm en diferentes estudios.

Dicho esto, la tendencia en la literatura de investigación actual sugiere que la protección del tobillo proporcionada por los zapatos de caña alta puede no ser suficiente para reducir significativamente el riesgo de esguince al practicar deporte.

De hecho, este diseño también puede reducir el rendimiento deportivo y aumentar el riesgo de esguince de tobillo en algunas personas.

Las investigaciones respaldan la idea de que los zapatos de caña alta brindan buena estabilidad cuando las fuerzas externas pueden causar un esguince de tobillo cuando la persona está estacionaria (por ejemplo, cuando una persona que está quieta es golpeada desde un costado y comienza a caer, ejerciendo presión sobre el tobillo). ).

Sin embargo, una vez que empiezas a moverte, es una historia diferente. De hecho, algunas investigaciones sugieren que los zapatos de caña alta pueden incluso aumentar el riesgo de esguince de tobillo en algunas actividades.

Esto puede deberse a que estos zapatos pueden cambiar la forma en que usamos los músculos de los tobillos y las piernas.

Específicamente, los músculos en la parte exterior de la parte inferior de la pierna pueden comenzar a activarse más tarde y no trabajar con tanta fuerza para endurecer el tobillo cuando usas zapatos de caña alta (en comparación con zapatos de caña baja).

Para reducir el riesgo de esguince de tobillo, es importante que los músculos de ambos lados de las piernas trabajen juntos al mismo tiempo.

Es revelador que la activación retrasada y más débil de los músculos de la parte exterior de la parte inferior de la pierna sea mayor en personas con inestabilidad crónica del tobillo. Este hallazgo sugiere que los zapatos de caña alta pueden no ser la mejor opción para cualquier persona con antecedentes de esguince de tobillo.

También existe cierta evidencia de que el uso de zapatos de caña alta puede impedir el rendimiento deportivo al reducir la altura del salto y aumentar la transmisión de impactos a otras partes del cuerpo.

Conseguir el ajuste adecuado

Los soportes externos, como cinta adhesiva y aparatos ortopédicos, son eficaces tanto en tobillos ilesos como en tobillos previamente lesionados. Pero son más eficaces cuando se usan en combinación con programas de ejercicio preventivo.

Lo que es crucial a la hora de seleccionar calzado es un buen ajuste y una buena función. El calzado debe ajustarse al pie en largo, ancho y profundidad, con el ancho de un pulgar entre el extremo del dedo más largo y la punta del zapato. Debe tener suficiente espacio en la parte anterior del pie para que no quede tenso al estar de pie.

Sin embargo, alrededor del 70% de las personas usan zapatos que no les quedan bien. Las mujeres y las niñas suelen usar zapatos demasiado estrechos, y los hombres mayores suelen usar zapatos demasiado largos.

El calzado mal ajustado puede aumentar las caídas, inducir mayores niveles de osteoartritis e impedir el funcionamiento natural del pie en adultos y niños.

Asegúrese de tener el zapato adecuado para el trabajo. La forma debe adaptarse a la función.

Por ejemplo, tiene sentido usar una zapatilla de deporte de caña alta y bien ajustada durante actividades estáticas en las que se está de pie.

Sin embargo, una zapatilla de deporte de caña baja puede ser más beneficiosa durante actividades deportivas que requieren paradas frecuentes, saltos, cambios bruscos de dirección o para personas con antecedentes de esguinces de tobillo.